El día 28 de octubre de 2012 el periódico
Información publicó una noticia relacionada con la FPA y, como en mi opinión es
interesante, os la dejo aquí colgada junto al enlace del diario digital.
Ofertas de trabajo muy complicadas
Las exigencias del mercado laboral alejan a 20.000 alicantinos de tener un empleo
Más de 20.000 alicantinos se ven rechazados actualmente por parte de las empresas en el mercado laboral, pese a disponer de la mínima titulación básica: un graduado. El caso es que esta población se graduó con el sistema educativo de la Ley del 70, el graduado de EGB o título al término de octavo curso de Educación General Básica. Son todos ellos mayores de 27 años, porque el paso de aquella ley a la LOGSE, que ya estableció el actual graduado de Secundaria, tuvo lugar en el curso escolar1996-97.
"Son graduados equivalentes según la legislación, pero el mercado laboral se ha vuelto más exigente por la elevada demanda para los puestos de trabajo, y las empresas no miran currículos que no incluyan como mínimo el graduado escolar", lamenta Pau Blanes, coordinador de los centros de Adultos de la comarca de l'Alacantí y director, a un tiempo, de la EPA o Escuela de Personas Adultas de Tómbola.
Blanes ha visto multiplicar en sus aulas la demanda de estudiantes con edades entre 30 y 45 años, todos ellos con la misma característica: tienen su graduado en EGB, pero para las empresas son invisibles. Y estos centros no pueden convalidarles ninguna materia, hay que presentarse a todo el graduado de Secundaria que ahora se prolonga hasta los 16 años de edad escolar obligatoria.
En su mayoría, son personas que han estado trabajando los últimos quince años y ahora se ven en la calle y sin la mínima titulación que reclaman las empresas. "No tienen culpa de que en su época se estudiara otro graduado y, de hecho, Educación lo considera equivalente, pero no así los que contratan", añade Blanes.
Un plus necesario
Tener el graduado escolar en el currículum implica también ser más joven, entre 18 y 26 años, y en el mercado laboral se valora que han estudiado dos años más obligatoriamente en las aulas: hasta los 16 años y no hasta los 14 como con la ley del 70, pese a que esta circunstancia no asegure que se esté mejor preparado.
De cualquier forma, y como atestiguan expertos en Educación, como el inspector Vicente Díaz, "el empleo es tan escaso que ni siquiera basta con el graduado, aunque sea el de Secundaria. Las firmas en realidad reclaman ya algún otro requisito, por lo que hacer algún módulo de Formación Profesional o tener el Bachillerato o el acceso a la Universidad, empieza a ser considerado un plus casi necesario para acceder a un empleo. El graduado empieza a dejar de ser una garantía para las empresas", añade.
Blanes sostiene que esta situación provoca cierta inquietud entre sus alumnos, que en realidad estudian el graduado en su mayoría como un puente hacia otras especialidades: ciclos de formación profesional o las pruebas de acceso a la Universidad.
El cruce de datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada esta misma semana y del Instituto Nacional de Estadística (INE), revela que la población de la provincia mayor de 27 años y hasta los 60 años, demandante de empleo, y con la titulación básica del graduado, supera las 20.000 personas que se están viendo discriminadas a la hora de la contratación laboral por la cada vez mayor escasez de empleos.
VICTORIA BUENO